sábado, 3 de agosto de 2024

Lágrimas de Sal

Desde niña, mi mayor característica ha sido la sensibilidad de mi alma.

Siempre fui de esas personas a las que el profundo sentir las atraviesa, de esas almas que se nublan de soledad los domingos, de esas almas a las que les quedan grabadas las heridas, de esas almas que lloran con hipo hasta quedarse dormidas.

Mi alma, tan frágil como el vidrio de una copa de cristal, se quiebra en pedazos, y mis lágrimas son la explosión de los cristales de mi alma, que bailan tango en mis mejillas al borde del abismo. Mis lágrimas inundan mis ojos, un océano de mariposas se siente.

Mis lágrimas son de esas que no tienen vergüenza, que se asoman sin avisar, que te sorprenden inesperadamente, inexplicablemente. ¿Quién puso ahí mis lágrimas si yo estaba bien? Y de repente… PUM: florecen. Ellas son el reflejo de la sensibilidad de mi alma.

Me conmueven las historias de amor, el dolor de otros. Me conmueve la mirada dulce de un anciano y también la de un niño. En bodas de personas que ni siquiera conozco, mis ojos se ahogan en lágrimas de sal, de la emoción, de la ternura; mi corazón se estremece.

La risa de mis padres, los recuerdos más lindos de la vida, esos que se dibujan en la mente y queremos abrazar, deseamos volver a estar ahí. Lo pienso y de inmediato empieza a picarme la nariz, avisándome que se vienen mis lágrimas. Puedo parecer débil, pero la fragilidad del alma es, para mí, el grado humano que tenemos en la sangre, ese grado de sentir la vida con mayor intensidad. Somos algunos pocos los que tienen este poder, capaces de crear un mar de las infinitas lágrimas de sal que hemos desparramado a lo largo de nuestra vida, cargadas de historias, de dolor, de amor y desamor, de hermosos recuerdos y terribles pérdidas, de heridas abiertas y algunas ya inexistentes. Todas las lágrimas, pequeñas casi imperceptibles, abrazan historias inmensas.


Chari Ahumada.

martes, 13 de junio de 2023

La escritora que no fui.

Pienso, sueño, siento.

Quiero ser pero no soy. me quedo con la sensación de lo que pudo haber sido y no fue.

Podría escribirte las canciones más lindas del mundo, abrazarte en palabras, hacerte volar. Elevar tu alma al cielo, y que puedas ver fuegos artificiales, lucecitas, flores, colores, mariposas y estrellas. Hacer tu corazón estallar de amor y de ternura.

Podría hacerte soñar, llevarte a recorrer mi mundo, descubrir nuevos horizontes, volar por cielos maravillosos, aterrizar en otros universos.

A veces pienso que soy una escritora atrapada en un cuerpo común y corriente, de una persona común y corriente, con una vida común y corriente, con poco tiempo y muchos sueños, con cosas pendientes. A veces pienso que avanzo en la vida sin haber hecho eso que está ahí latente en mi esperando su momento de gloria, y ojalá algún día esa flor se coniverta en jardín.

Escribir es como bailar al compás de la musica, las letras salen del corazón, se van dibujando, florecen, giran, saltan, se encienden. Los sentimientos y las palabras van juntos, bailando en el papel.. y mi mano los dibuja, y todo parece ser canción. Un poeta es mundo encerrado en un hombre, un mar de palabras, figuras, dibujos, olores y sabores, un mar de sensaciones, miles de historias, heridas y amores que navegan en la imaginación y quieren salir al mundo en forma de letras sobre papel, quieren florecer, quieren echar raiz y dar vida. Entre mi amplio amor al arte escribo, y simulo ser la escritora que no fui, eso que aún sueño algún día ser, la literatura saca lo mejor de mi y me convierte en un alma sensible, me hace ser más humana, más vulnerable. Saber que nos podemos romper nos hace querer ser eternos, conocer la fragilidad de nuestra alma nos hace más humanos, mas nobles. Más reales.

Y como lo dijo Cortázar, escribir es hacer el esfuerzo de soñar. y yo quiero vivir soñando.


Chari Ahumada.

13 de Junio - Día del Escritor .

martes, 16 de noviembre de 2021

Escribir es como vivir

La felicidad íntegra en un presente es una utopía, siempre lo pensé, por más desalentador que suene. Yo me encargué de convertirlo en positivo: ese camino, hacia ella, es mágico, es la vida, y creo que intentando ser feliz en el trayecto, se puede ser feliz de todas formas, por más que ella como "perfecta" y "completa" esté en el horizonte; y como bien dijo Galeano, se aleje a medida que yo me acerco.


Con escribir me pasa algo similar. Es una expresión de aquello que entiendo que pasa en grandes términos. Tengo una idea, un pensamiento, un sentimiento; me muero de ansiedad por pasarlo a palabras. Entonces empiezo a redactar, pero la hoja en blanco me inquieta, me incita a querer terminar, a poder cerrar ese sentimiento, respetando lo más posible cómo se me presentó a mí, esforzándome por no haberme extraviado en palabreríos y perdido en la intención.


Finalmente al texto lo termino. Y de repente, como si nada, aparece un vacío, como si esa búsqueda de perfección al ordenar las palabras hubiera sido un desasosiego que, sin darme cuenta, me generara bienestar; como si esa ansiedad me diera una satisfacción de ese tipo de la que sólo te das cuenta cuando quedó atrás.


También ya lo pensé alguna vez: el hombre feliz es aquel que aprende a disfrutar de los recuerdos habiendo matado la nostalgia. Pero, después, lo entendí bien: el hombre feliz es el que se da cuenta de que es feliz cuando lo está siendo, y no un rato después. Igual, siempre va a ser así: el hombre es un eterno buscador. Y qué bueno que así sea. Yo me aburriría, sino.


Chari Ahumada.







martes, 9 de noviembre de 2021

La vida sin vos

La vida sin vos no corre, no avanza, el tiempo pasa a una velocidad lastimosa, que te da ganas de empujarlo, de apurarlo.

Las horas duran el doble, y yo te sigo esperando.

Por favor, correte un poquito de mis pensamientos que no puedo avanzar con tu nombre todo el día en mi cabeza.

La vida sin vos está en pausa, como los arboles secos esperando la primavera para florecer, la vida sin vos es una constante espera, cada noche mi mente se niega a descansar, esperando siempre ese mensaje que no llega.

jueves, 2 de septiembre de 2021

El destino

 Me gusta que me gustes.

El amor a veces viene a probarnos que existe y se va.
El amor a veces llega, toca la puerta, dice hola y en un instante dice chau.

Como un tren que pasa y te subís sin saber bien a donde vas. llegás sorprendido a un lugar mejor del que esperabas.



Tu amor fue el destino, ese destino incierto de lo que no esperaba.
No solo me enamoré de las ganas que tenía de enamorarme de vos.


Dejando  de lado el idilio , me mostraste que no es solo amor. Es una locomotora tirando para el mismo lado.
Ponés las palabras y los silencios en los lugares justos, y también me invitas a decir lo que siento.
A ser sin decir, A decir siendo.
A ser con vos y por vos.
A ser los dos juntos algo nuevo.

Sos al que miro y digo, claro, rompimos estructuras, o las rearmamos cada vez.

El amor es idílico, por eso digo que esto no es solo amor, amor también  es empujar los dos para el mismo lado, tender la mano, poner el hombro.

El verdadero amor es el que se siente por aquello que a simple vista no se ve, es enamorarse del alma, de la esencia.De todo eso que para uno es naturalmente cotidiano pero para el otro es magia, pura y auténtica magia.

Chari Ahumada.-

sábado, 27 de febrero de 2021

Lo real

Podríamos decir que lo más importante de la vida está en la magnitud de los grandes logros, y de sus derivados acontecimientos. 

Aunque para ser sinceros, de esta manera nos estaríamos perdiendo de los detalles más sutiles que envuelven el día a día . Si nos olvidamos de presenciar el momento ¿Cómo es posible cultivar el contento como hábito? 

Somos cada detalle que nos rodea, cada sonrisa que nos encuentra, cada mañana que se nos regala. 

El todo vuelve a ser lo simple, cuando nos damos cuenta de que en lo simple está lo real.



sábado, 15 de agosto de 2020

Al dolor y sus infinitas metamorfosis.

No quería volver a escribir sobre el dolor, pensaba no volver a hacerlo.

Hasta creí no volver a sentirlo, después de tantos y tan fuertes dolores emocionales por los que pasé, me sabía fuerte y estaba convencida de que iba a soportar cualquier próxima decepción, después de tantas sacudidas, de tantos atropellos. De caer y levantarme. Sabés? Me caí más veces de las que me levanté, tantas veces no llegaba a pararme de completo y caía otra vez. 

Sabés, me asusta mucho tomar decisiones, porque en el momento que las tomo estoy convencida que es lo mejor.. pasa el tiempo y pum, choco con la pared. Y duele el alma, duele mucho.

El dolor a veces nace en el corazón y lo sentís viajar por tu cuerpo a través de las venas. Se esparce despacito, como si de verdad el dolor buscaría causar en vos un “date cuenta” no repitas el error. 

“Acá estoy, soy el dolor y vengo a hacerme notar por muchos días para que aprendas”

Todo pasa por algo, así dicen, todo nos enseña algo. Pero pucha, como duele.

Uno supera ese dolor, y dice listo muchachos ya me levanté, me sacudo la ropa y sigo. Das dos, tres, cuatro pasos más y ahí tenés de nuevo: el dolor acercándose. Y ojo, vos no te das cuenta, estás seguro, segurísimo de que ya sos fuerte, de que lo podés todo.

Pero el dolor está ahí, esperando aparecer para enseñarte de nuevo que tenías que pensarlo dos veces, pensarlo mejor. 

Desnudaste tu alma frente a los ojos equivocados, ahora sentí el dolor para que la próxima no lo des todo.

Anda de a poco, despacio.

Reflexioná, respirá, sonreí. Equivocate y aprendé. La espina siempre duele pero cada vez un poquito menos, vas a ver.